A través de las redes sociales, la gente del colegio José Ingenieros, informó, a mediados del año pasado, que “ya están en funcionamiento 45 paneles de energía solar de 300 watts que han sido instalados en la terraza de nuestra institución convirtiéndose en un Colegio sustentable con energías renovables. Los mismos trajeron como beneficio económico, el ahorro del 40% en la boleta de luz y ayudaron a reducir de manera considerable la emisión de CO2”.

El establecimiento de la calle Fray M. Esquiú, entre Maestra Baldini y Potosí, es el primero de nuestro distrito que concreta este tipo de emprendimiento que, se señala, fue impulsado por un proyecto de sus alumnos y se puntualiza que los equipos “tienen una capacidad de generación de 15 kilovatios y pueden “almacenar” energía para todo el edificio. En caso de que la energía solar no sea suficiente para abastecer todos los elementos conectados a los paneles – el ascensor, las bombas de agua, once equipos frío-calor y diez splits – el sistema permite habilitar la energía “guardada” en la red”.

“En el aula se trabajan cuestiones ambientales desde la práctica. Los chicos separan residuos, transmiten esas costumbres en sus hogares y al mismo tiempo elevan proyectos para que la institución desarrolle como ejemplo para la comunidad”, declaró Marta Albieri, docente de Ciencia y Tecnología de quinto año, al diario Clarín.

Por su parte, el representante legal del colegio, Hernán Alvarez, señaló al portal de noticias UAI , lo siguiente: “La energía eléctrica está siendo cada vez más cara y se utiliza con diferentes aplicaciones. Es una inversión que se recupera a siete años, contemplando solamente el 40% del ahorro en la boleta de luz. Se trata de una visión a largo plazo de la conservación del medio ambiente y del beneficio al ahorro de energía eléctrica”.
Agregó Alvarez: “Lo más importante que tiene la energía renovable es que es inagotable. En este caso, que pusimos los paneles solares, esta energía es producida por el sol, que es una fuente no contaminante, y al no usar un combustible fósil, lo que hace es evitar el calentamiento global porque evita la emisión de monóxido de carbono que es lo que producen las energías que no son renovables y limpias. Y eso es el primer paso importante para dar, tener una energía limpia que a su vez sea no contaminante y que sea duradera”.
Álvarez señaló que el trabajo de instalar las estructuras y amurar los paneles fue concretado por “una empresa de Lanús que es una pyme familiar argentina, que permite generar trabajo en el país y evitar la importación de la energía eléctrica y de la inversión del estado en la distribución de energía. La energía solar y la eólica sólo necesitan mantenimiento y la bondad de la naturaleza. También manifestó que se decidió colocar paneles solares en el colegio “porque tenemos un espacio en la terraza de secundaria que siempre estuvo al descubierto. Queríamos poner anergia eólica o solar. Con el paso del tiempo, la tecnología nos permitió abaratar los costos y estar parejo en un período corto de recuperación de la inversión”.
Álvarez apuntó que “hemos tenido muy buena repercusión de la comunidad educativa. Somos la primera escuela que invierte en paneles solares”.
Los directivos tramitarán en EDENOR la planificación para inyectar el excedente generado en el resto del país.