Abrió sus puertas el 25 de mayo de 1939. Bajó sus persianas 81 años después: a principios del fatídico 2020. En 2009 fue declarada Sitio de Interés Cultural

La inauguró don José Ottonelli, la continuaron José Montesano, Pocho Berro y Alicia Sánchez.

Como lo es El Fortín, en Villa Luro, la pizzería Ottonelli de la calle 3 de Febrero, casi Urquiza, era una de las pocas que tenía horno a leña (¿te acordás de Vicente?… Donato y Francis Mallman son un poroto al lado de él, al momento de sacar a punto la de muzzarella).

El local no se destacaba por lo limpito (El Fortín tampoco brilla por su limpieza) y no sorprendía que uno se encontrara con algún bichito dándose un paseo pero era parte del folclore, faltaba más.
El momento de llegar la porción de muzzarella al mostrador (los expertos aseveran que era preciso comerla de parado) , pegada al molesto papel, es y será para siempre, inolvidable.