Para quien esto escribe ser acusado (me sucedió, recuerdo) como “gil de lechería”, equivalía a algo parecido a “chauchón”, “pajarón”, remoquetes que, convengamos, ya cayeron en desuso.

Pero, hace apenas instantes, me acabo de informar de cuándo y dónde es oriundo el citado “gil…”.

Parece que el culpable fue un buen señor llamado Paco Medina que en, 1921, en el Paseo General Paz (Mar del Plata), inauguró un Tambo Modelo y… se le ocurrió agregarle un par de canchas de tenis.

Paco, se dice, fue un personaje destacado en la sociedad marplatense y el tambo tenis se transformó en un próspero negocio.

Íntegramente vestidos de blanco, los y las jóvenes de entonces, tras acontecer el match point, completaban la jornada bebiendo leche fresca al pie de la vaca.

Se cree que de aquí, de aquí, repetimos, nace la expresión “gil de lechería”.

La historia cuenta que “el negocio fue tan redituable que se sostuvo hasta 1935 y le permitió a Medina convertirse en un empresario hotelero exitoso, primero con el Hotel Pueyrredón de Alberti y Tucumán, y luego con el Metropol”.

Fuente: “La historia como nunca la viste”

Foto restaurada y colorizada. Trabajo realizado sobre foto en blanco y negro Gentileza Familia Álvarez Medina.