Mario Iannizzotto tenía 38 años. Todavía no eran las ocho de la mañana de hoy cuando se aprestaba, junto a un compañero, a recortar el césped en una vereda de la calle Guaminí al 5300, entre Pringles y Álzaga.

En una cámara quedó registrado cuando apoyado en su desmalezadora, observa el paso vertiginoso de una camioneta (había sido robada en Villa Bosch) que era perseguida por móviles policiales.

La secuencia del video muestra cuando de repente, Mario se desploma sobre la vereda: había recibido un disparo en el abdomen.

El trabajador fue trasladado al Hospital Carrillo, donde los médicos nada pudieron hacer para evitar su deceso.

Se informó que a pocas cuadras de donde asesinaron a Iannizzotto, en Ángel Pini y República,  los delincuentes que conducían la  camioneta robada embistieron a un móvil policial, y  tras balearse con los uniformados, escaparon para el lado de la Villa Carlos Gardel.

Comunicado del Municipio

“Nuestro apoyo y acompañamiento a la familia de Mario, un laburante que murió mientras trabaja. Él era podador autorizado y se capacitó en este oficio para ganarse la vida. Es muy injusto que un inocente pierda la vida mientras se combate el delito. Esperamos que la Justicia haga su tarea para que no haya más Marios que lamentar. En Tres de Febrero siempre nos van a ver del lado de la gente honesta”.