Aquella mañana de aquel frío domingo otoñal, a viva voz y a mano alzada, se designó a los integrantes de la Junta Pro Autonomía que gestionó la creación de nuestro distrito.


Se insistía en que a la Asamblea “no debe faltar ningún vecino bien inspirado y las representaciones de las diversas Instituciones de la zona”.

Decenas de vecinos concurrieron a la denominada Asamblea Popular, programada en el cine Urquiza.

¿Cuál era el objetivo de esta junta?: lograr que nuestro barrio (y localidades aledañas) se independizara del distrito Gral. San Martín, municipio al cual pertenecía por entonces. 

Viejo anhelo que había sido frustrado en varias oportunidades.

En la convocatoria a la Asamblea se indicaba que “encabezan el proyecto importantes representaciones de la zona” y, además, se subrayaban la actividad, decisión y nobles propósitos de quienes impulsan al movimiento autónomo que se lleva a cabo “al margen de toda influencia política o inspiración para beneficios particulares o de sectores privilegiados”.

PRIMER PASO

Pero que siempre se mantuvo latente.

El martes 19 de junio de 1956, con la firma de Félix Donetti y Héctor Carranza – presidente y secretario, respectivamente de la comisión Pro Autonomía – se envió una nota a las autoridades provinciales solicitándole al interventor bonaerense, coronel Emilio Bonnecarrere, una audiencia para informarle sobre los “problemas de bien público que atraviesa la zona”.

Respuesta: ninguna.

Pero la gesta autónoma había comenzado.

Y fue imparable: el 15 de octubre de 1959 nació Tres de Febrero.