La plaza “Hipólito Yrigoyen” (Villa Pineral) es un privilegio que poseemos los vecinos de Caseros. Sus árboles y su frondosidad consecuente no se pueden comprar en vivero alguno y, en ese aspecto, es la más favorecida del barrio. Se podrán adquirir obras de arte, mansiones, yates, pero en parte alguna se vende follaje en estado de esplendor.
El ombú que ocupaba el centro de la plaza era un símbolo de Villa Pineral. Por décadas, majestuoso, brindó sus ramas hospitalarias y la extensión de su sombra hasta convertirse en un referente de este rincón de Caseros. A fines de 2014, unos vándalos le prendieron fuego. En sólo una noche, destrozaron lo que la naturaleza demoró años en generar.
En enero de 2015, un grupo de vecinos donó y plantó un retoño que – ahora, ya crecido – se empeña en regalar su fresca y generosa sombra, tal cual lo hizo su antecesor a lo largo de generaciones.
¿Quiénes fueron los que llevaron a cabo la iniciativa?: Juan Carlos Romaszko, Rubén de Feliche, Eduardo Pranzo, Manuel Quintero, Argentino Chaves y Perla Chaves.
Seis años después, es gracias a ellos – que se encargaron no sólo de preparar la tierra y plantarlo, sino que también de cuidarlo en los siempre delicados primeros tiempos – es que el ombú (estimamos que es el único ejemplar que hay en Caseros) ya luce su renovado esplendor.
Muchas gracias, vecinos.
