Son parte de los distribuidos por el ministerio de Salud bonaerense de una tanda de 3 mil adquiridos para “fortalecer la provisión de este recurso vital en hospitales, UPAS y centros extrahospitalarios”, con la finalidad de “enfrentar a la segunda ola de Covid-19”, se informa.
“Los equipos entregados proporcionan oxigenoterapia a pacientes en concentraciones más altas que las del aire ambiente y mantiene estable el nivel de oxígeno en la sangre”, agrega el área de Salud bonaerense.
“Estos nuevos dispositivos son individuales y tienen un suministro infinito: implican una tecnología que permite tomar el aire ambiente y administrarlo a los pacientes a mayores concentraciones de oxigeno para garantizan el acceso a este recurso indispensable en este contexto sanitario”, se detalla.
También se pormenoriza “que la distribución de los concentradores se realiza en forma equitativa teniendo en cuenta la densidad poblacional en donde se encuentran emplazados cada uno de los hospitales”.
Por último, se señala que “el plan de contingencia para ampliar la producción de oxígeno desde el sector público incluye la instalación en las próximas semanas de 17 plantas móviles de oxígeno en las UPAs y una en Ensenada, que ya está en funcionamiento. Además, ya están produciendo las plantas en el Hospital San Roque de Gonnet que se sumó a la del Iriarte de Quilmes, que volvió a estar activa el año pasado. A estas acciones, se le incorpora la compra de 2 mil tubos para fortalecer el stock en los hospitales”.