Este monumento enrejado – ubicado en la esquina de Alberdi y Murias – guarda un secreto.
Además de placas que recuerdan la fecha natal de Caseros (21 de Febrero de 1892), los nombres de quienes gestaron la Autonomía y otras menciones; también en su espacio se levantan los mástiles con tres banderas: la nacional, la bonaerense y la de Tres de Febrero.

El lugar luce plantas y flores tanto en su centro o en su rededor.
Pero… ¿Cuál es el secreto? En realidad, más que un secreto es un recuerdo.

En 1992, cuando se festejó el centenario del nacimiento de Caseros, en el centro de este monumento fue sepultada una urna con revistas y periódicos locales, recortes de diarios, monedas, banderines, fotografías, etc.. Esta urna, se dispuso, deberá exhumarse en 2092, año del bicentenario de Caseros.

Además de lo mencionado, la urna guarda mensajes para los coetáneos de este fin de siglo. En uno de ellos, se lee, entre otros fragmentos, el envío de “un abrazo fraterno para todos aquéllos que tengan la bendita tarea de exponer al sol este legado de amor por nuestro querido Caseros Centenario”.

Es seguro que quien esto escribe, ese día no esté presente. Por las dudas, lo dejo escrito para que esos testimonios de afecto, guardados en esa urna, no se desvanezcan en el olvido.