Hasta avanzados los años ’90, nuestra plaza principal fue dominada por la dejadez.

Como “La plaza de la vergüenza” la describimos en un editorial. No exagerábamos. Era un barrial, un potrero. Sólo los bustos de bronce (también descuidados y más adelante, robados) en homenaje a nuestros próceres y algún que otro banco recordaban que ese terreno estaba reservado para lucirse como la plaza principal del distrito.

Fue la actual administración comunal anterior la que se ocupó de rescatar al predio.

A principios de 2003, se impulsó la remodelación que la dotó de plantas y flores, luminarias, pérgolas, juegos infantiles, mástiles, bancos con respaldo, un destacado reloj, senderos embaldosados, el denominado Patio de los Bustos y se recicló la locomotora antigua que se convirtió en una de las características de la plaza, etc.

Debe reconocerse que lo mismo sucedió con algunas de las restantes plazas del barrio.

NUEVA ADMINISTRACIÓN COMUNAL

En este aspecto, la gestión actual “subió la vara” y acentuó algunas mejoras que, además, se extendieron a otras plazas del distrito y espacios públicos que parecían olvidados.

Quizá, uno de los ejemplos principales lo encontramos en el estado del Edificio Municipal y sus inmediatos alrededores: está mucho más presentable y limpio en la actualidad.

LA PRIORIDAD, AHORA, ES CUIDAR

Introdujimos este prólogo con el objetivo de marcar lo que para nosotros en este momento es imprescindible: se trata de CUIDAR LO REALIZADO, independientemente de en cuál gestión se realizó.

Porque, es de lamentar, muchas de las obras ejecutadas cayeron en el abandono o fueron vandalizadas; un ejemplo: noches atrás destrozaron catorce luminarias de nuestra plaza mayor, a la que tomamos como modelo en esta nota.

En otros espacios públicos, las destrucciones se perpetraron en aparatos gimnásticos, juegos infantiles, plantas, murales, etc.

Sin importar quién la hace, es necesario que los recursos destinados a cada obra, tengan justificación. Y no lo tendrán si al poco tiempo de rasgadas las cintas inaugurales, cae en el abandono o es deteriorada por marginales.

Quizá, en más, sea el momento de que cuando se programe cada proyecto, lleve implícito el control para mantenerlo en condiciones que, en  definitiva, no evidencien gastos en vano.

En la nnaiiana del frio viernes 29 de agosto de 2013, el intendente Hugo Curio presidi6 el acto que inauguro la remodelaciOn, ante una numerosa concurrencia.

Desde entonces, la plaza Unidad Nacional se convirtiO en un espacio pdblico sumamente visitado tanto por su condici6n de espacio verde como por ser escenario habitual de numerosas propuestas culturales. Desde aquella inauguraci6n, en el lugar se realizaron ciertas modificaciones: algunas, lamentablemente obligadas por el vandalismo. A pesar de esto, la plaza continua manteniendose en muy buen estado.