En la década del ’30, Andrés Fedeli y su hermano Menardo fueron empleados por su tío – Ernesto Montanari – que tenía un corralón en Valentín Gómez y San Martín, nos comentó Andrés, en cierta oportunidad.
“Enfrente estaba el almacén de los Cavassa (1)… era un almacén que tenía de todo, allí se instaló el primer surtidor de nafta que tuvo Caseros; a media cuadra estaba la pulpería de Cavassa (2) con un palenque para sujetar a los caballos”.
En aquellos años, la casa propia era el sueño de los caserinos. El corralón de don Montanari abastecía chapas, arena, cal, cemento, madera, ladrillos…
“Montanari compraba las cajas de madera donde venían embalados los autos; con esa madera, que se vendía en el negocio, los vecinos se hacían el rancho. Avenida San Martín era de tierra, con zanjones… con Alberto y Santiago Borroni, mis amigos, íbamos a matar sapos… había tanto barro en Caseros que para llevar un pedido a Palomar se tardaba medio día. Teníamos que encadenar las ruedas del camión”.
Andrés Fedeli se enamoró de Élida, su prima, la hija de Ernesto Montanari. El matrimonio tuvo un hijo, Rodolfo.
FEDELI HNOS.
Cuando Montanari finalizó su trayectoria comercial, Andrés – junto a su hermano Menardo – se hizo cargo de la empresa a la que trasladaron enfrente (3), bajo el nombre de “Fedeli Hnos.” y, con esfuerzo, la hicieron pujante, importante, reconocida.
“Tuvimos una gran clientela… aquí nomás paraba el Tren Obrero que traía a los trabajadores de los Talleres Alianza. Ellos venían al negocio, elegían lo que necesitaban y lo iban pagando como podían; eran muy cumplidores, fueron pocos los clavos”.
“A mí, por el negocio, me conoce todo el mundo , salgo a la calle y escucho: ´¡Hola, Fedeli! ¡Cómo te va, Fedeli! ¡Chau, Fedeli!… Aunque claro, cada vez son menos , algunos ya se fueron…”, concluyó Andrés.
(1) En el mismo espacio que más adelante ocupó la pizzería Rigoletto y actualmente, es ocupado por una serie de locales y un edificio.
(2) Hoy, predio donde, al lado del ex cine Urquiza, se levanta un supermercado.
(3) Valentín Gómez (ex Cortada Silva) y av. San Martín, lugar donde actualmente abre sus puertas un gran verdulería.