Fue por los años sesenta cuando un grupo de amigos de la vida, apasionados por el folklore y asiduos concurrentes al club 9 de Julio, decidieron crear la Peña La Chaya.
Y los primeros pasos lo dieron en una casa de la calle David Magdalena, ubicada justo frente al club de sus amores: la casa de la familia Figueroa que se vistió con un amplio poncho de generosidad y alegría.
El 9 de diciembre de 1960 (hoy se cumplen 61 años) con el padrinazgo de dos representantes valiosos de nuestro folklore – Ángeles del Castillo y Félix Dardo Palorma – María del Carmen Cuqui Figueroa, Hebe y Horacio Anello, Teresa y Roberto Celeiro, Omar Tito Ciocca, Carmen Farasi, Armando Seticase, Ana María Marcoppido, Roberto De Simone, Emilia Re, Juan Carlos Dalhunty, Maruca Di Tomaso, Hugo Carnaghi, Zulema Sammartino, Belisario Díaz, Héctor Sammartino, Malena Guimpel, Alcides Pibe Devalle, Elsita Sconfienza, Esther Landolfi, todos amigos – algunos, futuros esposos – se hicieron fiesta en Caseros, en el club 9 de Julio y nacía así Peña LA CHAYA, danza creada por don Juan de los Santos Amores, con música de Alberto Castelar, quienes autorizaron, con gusto, el uso del nombre.
FOLKLORE Y SOLIDARIDAD
La Chaya, además de ser un referente del folklore en Caseros, trascendió la danza. Con lo recaudado en una presentación de don Jaime Dávalos, en el club República, se pudo colaborar con el Hogar de Ancianos San José.
En colaboración con José Pasciotti y Pedro Oscar Spinetta, se construyó un aula en la Escuela Diferencial N° 501, de Villa Parque, que fue bautizada con el nombre de la peña.
En 1979, la parroquia Nstra. Señora de La Merced la distinguió como entidad de bien público en Mérito a su acción cultural.
Desde 1960 y a pesar del receso (1985 – 2000) fueron muchos los folkloristas que dijeron sus notas en LA CHAYA: Hugo de la Silva; Juan de los Santos Amores; Juan Antonio Mortero; Los Cuatro Tiempos; Marta Viera; Alberto Castelar; Oscar Parras; Los Trovadores del Uritorco; Los Inca Huasi; Los Quilla Huasi; Los Seis para el Folklore; Los hermanos Abrodos; Alberto Ocampo; Jaime Dávalos; Karu-Manta; Los Ariscos; Buenos Aires Tango; Los Cantores del Alba; Los del Suquia; Los Cantores del Nguilla Tun…
Intervinieron muchos profesores: Carlos Zapata; Horacio Tedesco, Olga Lobos; Joaquín Martínez; Coco Refrancore; Beatriz Montorsi, Inés Bocca…
El 24 de junio de 2000, en una reunión de ex alumnos dio a luz el deseo de que La Chaya cantara, de nuevo, su fiesta. Cuqui Figueroa (de aquel primer grupo fundador), Juan José y Elsa Linares, Néstor y Rita Dalhunty, Enrique y Angélica López, Gabriela Sierra, Juan y Elvira Hajdil, Carolina Figueroa impulsaron el ánimo y entonces las palmas de Inés Bocca se escucharon nuevamente, ahora en el Salón Anexo Biblioteca Juan B. Alberdi. Siempre los amigos, sin fines de lucro, sólo con amor por la danza, las voces, las palabras, la tierra que sustenta cada uno de los pasos.
La Chaya tuvo muchas casas que hicieron posible su prolongada y querida trayectoria: Club Atlético 9 de Julio; Ateneo Cultural de Caseros; Confitería Lancaster (Urquiza y avda. San Martín); Fundación Banco Cooperativo de Caseros; Sociedad de Fomento de Villa Alianza; Club República; Asociación Fomento de Caseros; Centro de Industriales Panaderos; Sociedad Friulana de Buenos Aires; Fénix Club, Biblioteca Juan B. Alberdi…
Una noche, quizá melancólica, tal vez algo triste, La Chaya dejó de danzar. Pero ésta, ésta es otra historia